Introduzco el Bluray de FINAL FANTASY XVI. No sé lo que me espera. Mi anterior FF ha sido la remasterización del VII y quedé encantado. Comienzo la historia de Clive Rosfield habiendo evitado todo tipo de Spoilers y «gameplays» durante estos meses tras su lanzamiento. Tras haber terminado DEATH STRANDING toca una aventura más épica y de esas que SIEMPRE EMOCIONAN. Veamos por qué… ¿no?
FINAL FANTASY XVI
SINOPSIS: En las tierras de Valisthea, Clive Rosfiel es el guarda Ducal (y hermano mayor) del Dominante del Eikon FENIX, Joshua. Los Eikons son entidades/deidades que son invocados por estos «dominantes» cuando las circunstancias lo requieren. (…) Una noche, soldados de otro reino pretenden atrapar a Joshua y hacerse con su poder. Éste pierde el control del FENIX y aparece otro EIKON de fuego que lo fulmina. Clive es testigo de la muerte de su hermano y jura venganza…
Si quieres seguir la historia puedes pinchar y seguir el hilo en X.
ANALISIS PARTIDA
(28 oct.23) Empiezo a jugar FINAL FANTASY XVI. Tengo más juegos pendientes, pero a éste le tenía muchas ganas. Me ha costado evitar Spoilers y reseñas del juego, pero al menos lo que tenía escuchado se hablaba «maravillas». Así que empiezo mi partida con las espectativas MUY ALTAS. (LO PEOR QUE PUEDE PASAR, TE ADVIERTO).
En cuanto terminan las espectaculares imágenes de la «intro» del juego, la pelea de Eikons, las cinemáticas y demás… Me doy cuenta que este Final Fantasy XVI nada tiene que ver con juegos que he tocado recientemente. Asumo el papel de Clive y dándome una vuelta por el castillo, compruebo que un simple jardín «limita» mis movimientos no pudiendo pasar por encima de las flores. NO HAY MUNDO «LIBRE».
Es decir. No espero que FFXVI sea un juego de mundo «abierto» como The Witcher 3, no es su filosofía. Pero resulta del todo irreal que el personaje pueda ejecutar en combate infinidad de combos, saltos, vuelos etc. y luego sea incapaz de trepar por una roca para explorar el mapa. No me gusta eso del juego… Pero bueno, poco a poco voy re-situándome en este universo FFXVI, asumiendo esos «detalles» y apreciando otros BUENÍSIMOS.
Porque Final Fantasy XVI –al menos las 8 horas que llevo jugadas-, es puro Final Fantasy (quitando lo de los combates por turnos, claro, que de eso hablaremos en otro momomento). Puro Final Fantasy, como digo, por…
- Personajes SUPER-CARISMÁTICOS. Desde los buenos (Cid me tiene enamorado desde el minuto uno), hasta los malos.
- Banda sonora ESPECTACULAR acompañando todas las situaciones de manera sobervia.
- Las INVOCACIONES (Aquí llamados Eikons), que siguen impresionando en cuanto aparecen, da igual los años que pasen. Ver a TITAN, LAMU y ODIN en acción ha sido un deleite para mis sentidos.
- Historia de intrigas palaciegas, personajes atormentados y seguro que más de una sorpresa en el futuro.
Puro FINAL FANTASY (al menos desde mi punto de vista)
SISTEMA DE COMBATE
Quizás lo que más aleje Final Fantasy XVI de los «clásicos de PSone y PS2» es su sistema de combate Activo. Las batallas por turnos han dado paso a la acción más pura manejando a Clive. Combos con la espada, habilidades y esquivas hacen que los combates sean frenéticos y OJO, que manejemos únicamente a un personaje.
Soy de esos a los que gustaba poder manejar a varios protagonistas y especializarlos cada uno en «lo suyo». Fisicos, Mágicos, de apoyo… En el FVII Remake podíamos alternar a todos ellos y seguir un poco por esa senda. Aquí no. (…) Es un cambio que a muchos no gustará, pero yo de momento la GOZO repartiendo estopa con lo que nos ofrece Square Enix en esta entrega.
Como decía, apenas llevo unas horas con el juego y aún no manejo a Clive con «destreza». Pero ya me he quitado las ayudas iniciales (los ataques y esquivas automáticas) y poco a poco le voy pillando el truco a cambiar de poderes de Eikon y usar las habilidades de los mismos. Repartir ESTOPA es un gustazo TREMENDO, advierto.
LA GUARIDA
La Guarida es el lugar al que nos lleva Cid a lo largo de la aventura y donde están «pertrechados» los parias del Final Fantasy. Ahí puedes adquirir y mejorar equipamiento para seguir la aventura. Está bien no depender de que aparezcan tiendas y mercaderes por ahí, en el transcurso de la aventura… Pero no me termina de convecer que puedas «retroceder» desde cualquier punto del mapa/en cualquier momento de la historia, usando los obeliscos.
Observar que estás a punto de tener un enfrentamiento «importante» y tengas la opción de ir a pertrecharte debidamente en la Guarida, puede tener sentido jugablemente para no quedarte «atascado». Pero en cuanto al transcurso de la historia, no le veo lógica por ningún lado. En fin…
Tras derrotar a Benedikta y su Eikon GARUDA, sigo con las sorpresas y la historia de Clive (y Cid) en Final Fantasy XVI. Fijáos si será impresionante lo que se ve en pantalla, que hasta mi hijo me pide que juegue para que él pueda simplemente disfrutar mirando.
BAHAMUT Y ODIN
Llevo ya unas 32 horas de juego y tras acabar con Bahamut, toca enfrentarse al dominante y Eikon de ODIN. Barnabás… ¿Qué ha sucedido hasta ahora?
El alejamiento de este Final Fantasy XVI de otros títulos se va evidenciando con el transcurso de la partida. El manejo de Clive/Cid se parece más al de Kratos de God of War o al Trevor Belmont de los Castlevania de PS3: Muy basado en el golpe/aporreo y uso de habilidades en los combos. He derrotado y adquirido el poder de varios Eikons, pero sólo puedo «usar» 3 de ellos a la vez. Aunque claramente son «elementales», a la hora de la verdad, la única diferencia que noto son el tipo de habilidades que ofrecen.
Desde luego, el uso de la magia elemental aquí es testimonial. Aquí la estopa se reparte machacando botones y no es tan evidente la afinidad o debilidad de los enemigos a ciertos elementos. Tampoco existen los estados alterados como locura, escudo, prisa, confusión etc. Algo muy habitual en otros FF. En FFXVI echo en falta esa parte mágica de la saga.
Es un poco raro saber que estás jugando un FFXVI y no tener esas magias tan espectaculares a tu disposición (piro, piro+ y piro++). Era un aliciente -en otras entregas-, subir de nivel esas magias y ver lo que ocurría en pantalla cuando llegabas al máximo. Mucho más cuando soltabas una invocación y aparecía la animación de Titan, Lamu, Bahamut etc. ¿Verdad?
EIKONS
Ciertamente, no poder soltar una invocación a tu antojo es algo frustrant. Pero hay amigo… Lo que ocurre en FFXVI con las invocaciones/EIKONS es de otro nivel…
Cuando entran en escena las batallas de EIKONS la cosa es ES-PEC-TA-CU-LAR. De quitar el hipo. La batalla con TITÁN ha sido la ostia. La de BAHAMUT ha sido de otro mundo (literal) y la aparición de ODIN en plan Moisés (si habéis jugado sabéis de lo que hablo), ha sido de dejarme «ojiplático». (…) No sé que pasará con los protagonistas para poder enfrentarse a un ser de ese nivel…
No hecho de menos las invocaciones, la verdad. Porque lo que me ofrece Final Fantasy XVI a cambio es muchísimo mejor. «Lo bueno, si breve; dos veces bueno.»
MISIONES SECUNDARIAS
Una de las cosas que escuché/leí criticando fue el tema de las misiones secundarias. Una en especial que te obliga a ir a «comprar ajo»…
Ciertamente, me remito al inicio del texto en el que indico que es injustificable -argumentalmente hablando- que tengas una misión de historia con «cierta urgencia», y el juego te de opción a realizar misiones secundarias distribuidas por todo el mundo disponible.
Vale que puedes viajar con obeliscos y realizarlas en un ti-ta. Pero ocurre que, o te mentalizas que estás jugando un videojuego y asumes que esas misiones no tienes por qué realizarlas en ese momento, o te vas a mosquear cuando compruebes la irrelevancia de algunas de ellas. (…) Porque es así. Hay misiones que son importantes porque te pueden ayudar a mejorar el personaje con algún atributo necesario (mejorar el efecto de las pociones, por ejemplo), y hay otras que ni fú ni fá.
Yo me estoy dedicando a realizarlas cuando aparecen antes de seguir con la historia (sólo para que no se me acumulen y desaparezcan). Hay algunas, como digo, totalmente intrascendentes. Otras sin embargo le dan un trasfondo a la historia y completan el «lore» de FFXVI.
Hay un erudito en la guarida, HARPÓCRATES, que pone a disposición del jugador todo un glosario de personajes e información del juego. Supongo que «profundizaré» en él cuando termine el juego, pero de momento ahí lo tengo; en barbecho.
A estas alturas de juego… con las 32 horas. Creo que sólo me faltará terminarlo y dejar mis impresiones finales una vez concluída esta «fantasía final». Ya os contaré qué tal… Pero os adelanto que, a pesar del tono crítico que uso en este post, el juego me está gustando muchísimo y que lo recomiendo 100%
JUEGO TERMINADO
Tras unas 57 horas dedicadas, habiendo termiando todas las misiones secundarias, matado a todas las escorias y fabricando el mejor equipo para Clive, acabo de terminar Final Fantasy XVI. Hace apenas una hora que he soltado el mando para dejárselo a mi hija (que está con el Astro Boy) y toca contar qué ha supuesto este juego en mi experiencia jugable…
ANALISIS FINAL FANTASY XVI
Sin lugar a dudas, un juego que recomiendo 100%. No es el típico Final Fantasy, pero tampoco es God Of War. Del segundo adopta su estilo de combate más bestia (y simple en este caso), pero el espíritu Final Fantasy está por toda Valisthea. Tras finalizar la historia de Clive y compañia, he de reconocer que me ha tocado la patata muchísimo y en las escenas finales he llorado un poquitín ante todo lo que sucede.
No os lo voy a desvelar aquí, claro… Pero a eso me refería con lo del espíritu FF. Square-Enix nos ofrece un planten de personajes GENIALES (desde el protagonista hasta infinidad de secundarios) con unas historias que no siempre acaban bien.
Cómo no caer rendido ante el carisma del Cid original, empatizar con la situación de Dion y sufrir por todas las penurias que pasan los hermanos Rosfield. Mención a parte el plantel de secundarios, con un GAV que nos regala escenas superbonitas…
A eso voy… FFXVI como juego puede ser mejorable en un montón de aspectos. Y si nos ponemos a sacarle pegas, podemos estar aquí pasando el rato largo y tendido analizando cómo los protagonistas son capaces de realizar hazañas sobre-humanas -incluido volar- y luego no son capaces de vadear un río o pasar por encima de un jardín… ¿Verdad?
Pero, OPINO, Final Fantaxy XVI no es sólo un «videojuego». Es una manera de contar una historia. De lanzarnos un mensaje. Y en este entrega, creo que nos han lanzado un estupendo mensaje envuelto en un videojuego; resultón en lo jugable y ESPECTACULAR en cuanto a lo visual. (…) No supera en mi Ranking al VII (y su remake) ni al VIII, pero perdurará en mi memoria mucho más que otros posteriores que no me llegaron tan al corazón.
LO MEJOR
- Los personajes y su carisma. Desde los protagonistas, a todos los secundarios que pueblan Valisthea.
- Los EIKONS. Cuando aparecen majestuosos es un espectáculo.
- Las HABILIDADES. Fáciles de entender, escalar y usar en batalla.
- El diseño de las localizaciones. PRECIOSO
- La banda sonora. Que no destaca, pero seguro que si la escucho por «separado» me gustará aún más.
- Que ciertas misiones secundarias, le den un trasfondo más potente al juego.
- Que haya BESOS en un videojuego y escenas «tórridas» en la playa.
LO PEOR
- Algunas misiones secundarias
- Que puedas regresar a tu guarida prácticamente cuando quieras y realizar labores secundarias cuando hay un «peligro inminente» en la misión principal. No tiene lógica.
- El uso NULO de magias y objetos durante la aventura. Sólo he usado pociones, ultrapociones y sales protectoras.
- Poca expresividad de algunos personajes. A estas alturas se puede hacer más, creo.
- Que esté catalogado como RPG. ¿Lo es God Of War? No, verdad? Pues eso.
En definitiva, FINAL FANTASY XVI me ha GUSTADO MUCHISIMO y estoy más que satisfecho de haber adquirido el juego y seguir apoyando a la franquicia. Una vez terminado, quedará pendiente (como con casi todos), una partida+ pero de momento, desinstalo y doy paso al siguiente CYBERPUNK 2077 versión PS5.
Gracias por leer el post, DISFRUTAD de los videojuegos, de todo lo bueno que ellos ofrecen y sed FELICES.