ZX SPECTRUM: Mi primer contacto con los videojuegos

El ZX Spectrum es quizás la máquina que más nostalgia me despierta. Cuántas veces no habré intentado hacerme con uno de segunda mano, a pesar de saber a ciencia cierta que acabaría en el trastero. No creo que, a día de hoy, soportara lo que viví en su día frente a la pantalla del TV. Igual no sabes de qué te estoy hablando, así que paso a contarte mi experiencia con este ordenador y cómo descubrí con él, el mundo de los videojuegos. Más abajo tendrás videos explicando la historia del mismo. Yo, te cuento la mía…

El Spectrum 48k, entró en casa gracias a mis padres. Hicieron algún depósito en un banco y en lugar de «cubertería», escogieron este REGALAZO. No sabían lo que hacían… jajaja.
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El único dato que me sirve para contextualizar la llegada del Spectrum a casa, es que eran fechas próximos a mi comunión (¿1.984?). Recuerdo cómo en ella, una de mis tías, me regaló un radio-cassette para el mismo. (…) Antes de eso, otro recuerdo más importante fue el de la noche que montamos por primera vez el ordenador: Junto con mi padre, esperamos a que todos en casa estuvieran dormidos para desembalar todos los cables y armatostes. En la oscuridad, como unos ladrones para que no nos escuchara mi madre, recuerdo cómo conectamos todo: La toma de corriente para el ordenador, el radio-cassette donde se ponían los juegos, los cables de conexión a la pequeña TV que teníamos en la habitación…

Fue un momento emocionante cuando lo encendimos y sin saber muy bien cómo, empezamos a cargar y jugar -hasta altas horas de la noche-, los distintos juegos que traía. No sé quién estaba más emocionado, mi padre o yo.
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MIS RECUERDOS DEL SPECTRUM

El anterior, fue mi primer recuerdo de muchos con esta maravilla. Voy a repasar los más destacados y quizás, a medida que vayan surgiendo, iré editando esta sección.

Las eternas CARGAS. Si hay algo que todos los que hemos tenido el Spectrum asociamos al mismo, son las cargas de sus juegos. Los mismos, venían en cintas que eran leídas desde un radio-cassette conectado al ordenador por medio de dos cables. Tecleabas el comando de carga en el ordenador y cuando te lo pedía, pulsabas el botón PLAY del cassette. Lo siguiente, cruzar los dedos para que cargara correctamente.

Qué tensión mientras veía la pantalla del TV llena de rallas y escuchaba ruidos desagradables. Aparecía la imagen del juego en mitad de la carga, gloria. Aparecía el mensaje «loading error», mierda: A rebobinar y repetir el proceso.
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La PIRATERIA. Hablaré un poco más abajo de los juegos que más recuerdo y que, en su gran mayoría, eran originales y comprados en El Corte Inglés (De nada por la publicidad). Pero había un problema inherente al sistema de cintas de casette: Se podían copiar unas a otras. Cuántos cassettes de doble pletina se vendieron por ello. (…) La piratería en sus primeros pasos: Podías tener un montón de juegos guardados en una cinta TDK de 90 minutos. El único problema era «situarlos» correctamente para cargarlos, así que el cassette de mi comunión que tenía un contador de vueltas me vino estupendo. Sólo tenía que apuntar en qué punto estaba cada juego y llevar el contador hasta ahí.

Las REVISTAS y LOS TRUCOS. Compré varios juegos dejándome llevar por las sugerentes portadas que ofrecían. Más de un chasco me llevé, así que poco a poco, me empecé a fijar en las revistas especializadas que aparecían en los quioscos. Recuerdo comprar las Microhobby y el tamaño inmenso de las MicroManía de la época. En ellas, podía estar informado de las novedades del sector y comprar; sabiendo un poco más de lo que iba a encontrarme al llegar a casa. Además, recuerdo la lista de trucos y «pokes» que ofrecían para hacer trampas y conseguir vidas infinitas, inmunidad y otra serie de mejoras para poder pasarte ese juego que se te resistía.

Los ACCESORIOS y JUGAR ACOMPAÑADO. A medida que iba creciendo el éxito del Spectrum y las desarrolladoras sacaban juegos y más juegos, también aparecían los periféricos para tratar de asemejar la experiencia en casa, con la de los salones recreativos que abundaban en los 80. Compramos en casa varios joysticks con los que podíamos jugar a parejas a juegos como Gauntlet. No había muchos juegos para dos, pero los que había, los disfrutábamos a tope en familia. Recuerdo mucho un «mando» que sujetaba con la mano izquierda y que tenía los botones implementados en la misma, y con la derecha manejaba el stick

Los JUEGOS. Os voy a colgar un video con un montón de imágenes de juegos de la época. Podéis leer más al respecto en esta web: elmundodelspectrum.com. Yo, sin embargo, voy a mencionar aquellos que más me llegaron y por qué:

Los juegos de lanzamiento. Por ser los primeros que llegaron a casa. Space Invaders, Asteroids, Missile, (a mi padre le entusiasmaba éste y aún no sé por qué), y varios de Horace hace-esto-o-aquello.
GREEN BERET. Tengo la espina clavada de no terminar JAMAS este juego. Pero no será por la de veces que lo intenté. Creo que siempre me mataban los paracaidistas del final de no se qué pantalla.
GHOST GOBLINS. La recreativa era una pasada con una dificultad elevadísima, una auténtica traga-monedas. En el ordenador conseguía avanzar más y la experiencia era casi, casi, la misma. Este juego sería uno de mis favoritos también en SUPERNINTENDO.
WONDER BOY. Otra versión de recreativa, aquí llegaba más lejos porque tenía la opción de lanzar los hachas y tener el «turbo» para correr y llegar más lejos (la máquina de mi salón de juegos tenía estropeado ese botón, figúrate). Muchos mundos y horas frente a él.
COMANDO. Gráficamente muy lejos de la recreativa, disfruté un montón avanzando de pantalla en pantalla espachurrando soldados enemigos. Llegar a la parte final de cada fase, y colocarse frente a la puerta esperando a que salgan los malos para ametrallarlos vilmente, era lo máximo.
GAUNTLET. En mi versión 48k, lo mejor del juego era poder jugar con mis hermanos y avanzar nivel tras nivel, evitando como locos el toque de la «muerte». De los más divertidos para jugar en múltiple.
RENEGADE. Y su secuela Target Renegade, fueron de los juegos que más me impactaron en el Spectrum.
BARBARIAN. Aunque recuerdo que había un modo «historia». Lo que más disfruté del juego fueron de los combates Vs y hacer «rodar cabezas». ¿Quién no recuerda al enano dando patadas a las mismas?
BUBBLE-BOBBLE. Adaptación de recreativa, también para dos jugadores, y muy complicado de manejar con los joysticks que teníamos…
ARMY MOVES: Un juego original para el ordenador, donde se combinaban partes al mando de un jeep y un helicóptero, y en la «cara B», un soldado infiltrándose en un edificio. Sólo me gustaba la primera parte.
ARKANOID: De origen con el Spectrum, venía un juego llamado «el muro», que consistía en destruir una pared de ladrillos haciendo rebotar una pelota contra él. ARKANOID llevó ese esquema más allá y se convirtió en todo un fenómeno: En recreativas, y en nuestra casa gracias a esta máquina.
OPERATION WOLF. El que sea de mi «quinta» recordará la impresionante máquina de este video-juego. Aquellas UZIs para emular a RAMBO masacrando enemigos, fueron LA CAÑA de la época. Con el spectrum no teníamos las «armas», pero tampoco nos gastábamos 50 pelas por partida.
AFTER BURNER. Sin duda uno de los juegos que más se me parecía a la máquina. Manejar aquél F-14 en plena época Top-Gun era la caña. La recreativa tenía forma de carlinga de avión y era una pasada. Poder jugar en casa, un ahorro.
RAMPAGE. Otro de esos que podíamos jugar en familia. Los tres hermanos destruyendo edificios y comiendo humanos para reponer vida (hay que ver, los juegos de antes, eh?). Muchas risas y piques entro nosotros. Mis hermanos con joysticks, y yo con las teclas, menudas partidas más animadas echábamos.
BOMB JACK. Directamente de las recreativas, este Bomba Jack estaba bastante bien adaptado a nuestro spectrum. Con una mecánica simple: Saltar y coger bombas, entrenabas en casa para luego demostrar lo aprendida en el salón de juegos y quedarte con todos… Poner el récord en lo más alto era una vacilada.
MATCH DAY 2. A día de hoy, donde mandan los FIFA y los Pro-Evolution, echo de menos un juego que me calara tanto como este Match Day 2. Indescriptible cómo era jugar al fútbol con esa perspectiva isométrica, pero recuerdo echar muchas horas a él.
FERNANDO MARTIN BASKET MASTER. Piques a cascomporro en este uno contra uno de baloncesto. A la máquina era complicado ganarle, pero a mis hermanos pequeños: eso ya era otra cosa, jajaja.

Mención especial también para un par de esos juegos, que recuerdo por MALOS MALÍSIMOS y que, todavía hoy, no sé cómo pude llegar a comprar: UCHI-MATA (Un juego de Judo donde jamás supe qué teclas había que presionar para hacer las cosas), y BAZOOKA-BILL. ¿¿¡¡?? Pasaba de pantalla en pantalla sin saber qué era lo que había que hacer ni el objetivo del juego.

Podría extenderme eternamente con todos los juegos que pude catar en mi época de ZX Spectrum. He dejado arriba los más destacados, pero reconozco que a medida que escribía de uno, me venían más a la cabeza…
JFIbarreche

Voy a acabar este recorrido, dejándote aquí abajo un par de videos que te muestren la historia y los videojuegos de los que se componía esta maravilla. No estarán todos, pero espero que sean suficientes para que entiendas de dónde venimos los jugones de antes, y comprendas cómo nos maravillamos con las máquinas que sacan actualmente.

HISTORIA DEL ZX SPECTRUM

JUEGOS DEL ZX SPECTRUM

Gracias por haber llegado hasta aquí. Si quieres seguir con mi recorrido por los videojuegos, lo siguiente que viene es: NINTENDO 8 BITS.

Un saludo, buenos vicios y recuerda; sé feliz

Fuente principal de información de los juegos: www.elmundodelspectrum.com